Brutal represión con balas de goma y gases en las puertas del Congreso
Las fuerzas federales, comandadas por Patricia Bullrich la emprendieron contra la multitud que se expresaba en contra de la Ley Omnibus. Llamativamente reprimieron aunque no se cortaron las calles.
El gobierno de Javier Milei emprendió una brutal represión contra manifestantes, jubilados y periodistas que se encontraban en las inmediaciones del Congreso Nacional en el marco del tratamiento de la “Ley Omnibus” que envió el ejecutivo.
El primer episodio represivo comenzó sobre el final de la tarde, cuando los uniformados subieron a la plaza de los Dos Congresos en moto para disparar con balas de goma directamente contra la multitud, lo que provocó que los diputados de Unión por la Patria solicitara suspender la sesión, sin que el resto de los bloques acompañara la moción.
Frente a esta situación, una treintena de diputados de diferentes bloques decidieron abandonar el recinto para hablar con los responsables del operativo que de todas maneras no dieron la cara y se limitaron a negar que hubiera habido personas reprimidas.
Sin embargo, mientras la sesión seguía como si nada hubiera ocurrió, en las puertas del Congreso la gendarmería comenzó una represión indiscriminada que incluyó a varios periodistas que se encontraban cubriendo la sesión y la manifestación.